Tcol. Jorge M. López: «La UME es una unidad singular de las FAS por sus características, procedimientos y prestigio militares»
La UME está formada por 3.251 militares, de las que 236 son mujeres, entre cuadros de mando y personal de tropa y marinería, formados específicamente para el cumplimiento de su misión
La UME es «ágil, flexible y resolutiva» debido a su carácter militar, mando y control, sostenimiento y distribución geográfica
Geoes21
Jerónimo Martínez
Murcia, 24 de febrero de 2024
La jornada dedicada a conocer «La Unidad Militar de Emergencias: misión, capacidades y retos de futuro», incluída en el V Curso de Seguridad y Defensa para profesores de la CARM, organizado por la Delegación de Defensa de la Región de Murcia, enmarcada en «La Cultura de la Paz, la Seguridad y la Defensa: una responsabilidad compartida» contó con la presencia del Teniente Coronel del ET Jorge Mariano Pérez, Jefe del BIEM III de la UME.
En su intervención ante los docentes, el responsable de la UME recordó que esta unidad «es una fuerza conjunta que se constituye de forma permanente, bajo la dependencia de la persona titular del Ministerio de Defensa, como mando de Emergencias para cumplir la misión asignada a las FAS de intervenir en cualquier lugar del territorio nacional y en el exterior, para contribuir a la seguridad y bienestar de los ciudadanos en los supuestos de grave riesgo, catástrofe, calamidad u otras necesidades públicas». De igual forma, la UME participa en el cumplimiento de las operaciones militares que se determinen.
Más adelante, el Tcol. Jorge Mariano Pérez manifestó que la Unidad Militar de Emergencias es uno de los componentes de la Seguridad Nacional, basado en tres aspectos: Defensa Nacional, Seguridad Pública y Acción Exterior, y dentro de la Seguridad Pública también está relacionada con la Seguridad Ciudadana y Protección Civil.
Para su despliegue, la UME está estructurada de la siguiente manera: Cuartel General, Unidad de Cuartel General, Regimiento de Apoyo e Intervención en Emergencias, Batallón de Transmisiones y Primer Batallón de Intervención en Emergencias, en Torrejón de Ardoz. Por su parte, la base aérea de Morón cuenta con la presencia del Segundo Batallón de Intervención en Emergencias, mientras que la población valenciana de Bétera alberga al Tercer Batallón de Intervención en Emergencias. El cuarto y quinto batallones de Intervención en Emergencias están adscritos a Zaragoza y San Andrés de Rabanedo (León).La Escuela Militar de Emergencias tiene su sede en Torrejón de Ardoz.Cada uno de los batallones está compuesto por Mando y Plana Mayor, Compañía de Plana Mayor y Servicios, dos compañías de Intervención en Emergencias Naturales (CIEN) Y una Compañía de Ingenieros (CING). Además, el BIEM II tiene la particularidad de disponer de una unidad en las Islas Canarias, ubicadas en dos destacamentos en las islas de Gran Canaria (base de Gando), y Tenerife (Acuartelamiento «Los Rodeos».
Por su parte, el BTUME se compone de Mando y Plana Mayor, Compañía de Plana Mayor y Servicios, Compañía de Transmisiones de Puesto de Mando Fijo y Compañía de Transmisiones de Puestos de Mando Desplegables.
En total, 3.251 militares, de las que 236 son mujeres, entre cuadros de mando y personal de tropa y marinería, formados específicamente para el cumplimiento de su misión.
En conclusión, señaló el Tcol. Jorge Mariano Pérez, la UME es «una unidad singular de las FAS por sus características, procedimientos y prestigio militares», integrada en el SNPC, con interoperabilidad con Comunidades Autónomas, agencias, organismos del ámbito de emergencias. La UME es «ágil, flexible y resolutiva» debido a su carácter militar, mando y control, sostenimiento y distribución geográfica, precisó el conferenciante.
Asímismo, la UME posee capacidades para afrontar riesgos naturales, RRTTyMA y para apoyo las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. La UME también «es un instrumento eficiente del Estado como elemento de fortaleza de acción nacional en el SNPC y Sistema Nacional de Gestión de Crisis; complementariedad con los servicios de Emergencias de las Comunidades Autónomas» y «canalización del esfuerzo del resto de las FAS. Primera intervención».
